
Este viernes los representantes de la agrupación Despedidos Textiles de Alpargatas fueron recibidos nuevamente por el subsecretario de Trabajo, Marcelo Pedehontaáa, acompañado por el subsecretario de Industria, Marcelo Tonelloto. El encuentro se había gestado el día anterior, cuando los extrabajadores de Calzar se manifestaron para pedir respuestas al gobierno y cuestionaron por promesas incumplidas a los funcionarios. Por la agrupación participaron del encuentro Cesar Pérez y Elsa González, entre otros.
La reunió duró una hora y media. El vocero de los trabajadores, César Pérez, contó que la única respuesta de los funcionarios fue el ofrecimiento de ayuda social para las familias que lo necesiten. Los trabajadores entergaron el listado con 212 nombres y sus datos personales. “De puestos de trabajo o empresas que se puedan radicar o abrir, que es lo que más nos importa, no hay nada”, dijo a la salida.
“No estamos acostumbrados a vivir con una tarjeta alimentaria o con una ayuda social. La nuestra fue una vida de trabajo. No nos vamos conformes porque lo que pedimos es trabajo, no nos interesan otras cosas”, señaló.
Según contó, les pidieron que aguarden hasta marzo, pero “la gente no aguanta tres o cuatro meses más, no dependemos de los tiempos de los empresarios”.
Pérez dijo que los funcionarios evaluarán las planillas y entre viernes y lunes de la semana próxima los llamarán. “Ellos evaluarán todo, para que sea más transparente, más que nada. Nosotros no vamos a decir quién necesita. La pelota la tienen ellos”, contó.
El trabajador dijo que las personas que invirtieron el dinero de la indemnización en algún emprendimiento como una peluquería o una panadería, no solucionaron su situación. “La misma crisis se los comió”, graficó.
“Pasamos muchas crisis en Alpargatas, pero esta directamente nos sacó del sistema. Quedamos a la deriva. Tampoco el gobierno provincial salió en socorro o ayuda nuestra, con capacitaciones o preocupándose como uno espera de un gobierno”, confió.
Pérez mencionó que trabajó 23 años en Calzar. Ahora lleva 580 días desocupado. Lleva la cuenta día por día. Tiene 47 años y, lamenta, “la edad también te juega en contra”. “Me presenté en un lugar y me preguntaron si iba a poder estar las ocho horas parado”, confesó.
Los despedidos habían marchado a Casa de Gobierno el día anterior. En un petitorio que entregaron en Casa de Gobierno, reclamaron al gobernador Sergio Ziliotto que “arbitre los mecanismos posibles para volver a contar con nuestra fuente de trabajo”. También solicitaron asistencia social a las 240 familias de los operarios que perdieron su trabajo. Reclamaron incluso que el gobernador los reciba personalmente.
Le piden que haga de “nexo” con inversores que puedan reabrir las puertas de la principal fábrica que supo tener el Parque Industrial de la capital pampeana.
Reconocieron en el petitorio que el Gobierno anterior, de Macri, “destrozó la matriz productiva del país”. “Como trabajadores necesitamos todo su esfuerzo y compromiso con nosotros”, rogaron en el mensaje.
Cabe recordar que el año pasado se difundió que la empresa John Foos iba a reabrir la fábrica y contratar a los despedidos de la ex-Calzar. Hubo un periodo de entrevistas y evaluación. Pero los meses pasaron y no hubo más novedades.
“Somos 250 y hay cuatro o cinco trabajando en blanco. Que consiguieron trabajo por cuenta de ellos. Ellos (por el Gobierno) nos dicen que no tienen 250 puestos de trabajo, y es entendible. Pero en un año y medio, ¿no pudieron acomodar dos personas por mes?”, se había preguntado González el jueves.
“Nosotros estamos pidiendo trabajo. Llevamos un año y medio. Dijimos que puede ser cualquier trabajo: Carnes Pampeanas, la fábrica de caños, que nos manden a la laguna a limpiar, que hagan una cuadrilla para limpiar calles. Queremos trabajar, tener un sueldo como teníamos”, redondeó.