“Fue un día agitado hoy para nosotros”, publicó el jueves por la noche Luján Lucero. “Ya más tranquilos les quiero contar que Nadia ya fue trasladada a una sala donde está muy bien asistida con todos los cuidados que necesita tanto médicos como la seguridad policial. Hoy por fin puedo pasar la noche acompañandola; así que estoy feliz”, confió.
Agradeció “infinitamente a todo el personal de terapia II, por lo que hicieron por mi hermana al igual que los doctores y enfermeros que la recibieron en la guardia el día que ingresó al hospital”.
“Ahora nos espera una larga estadía acá pero estoy segura es el comienzo de algo bueno”, se ilusionó.
La joven víctima de una brutal paliza hace más de dos semanas, lucha por su vida en el hospital Lucio Molas. Está grave.
Nadia tiene 22 años y dos hijos. Su agresor y pareja, Laureano González, permanece preso, acusado de intento de femicidio agravado, luego de haberla abandonado en la guardia del nosocomio.
Dos semanas de vigilia
Nadia fue retenida por Laureano González el domingo 15 de diciembre durante casi 20 horas. La golpeó y la sometió a torturas. Le provocó la perforación de un pulmón y la complicación de sus órganos vitales, entre ellos los riñones. Nadia fue sometida a dos diálisis.
La familia de Nadia convocó a diferentes marchas para pedir justicia. El viernes de la semana pasada hubo movilizaciones en distintas localidades de La Pampa.
La relación de Nadia y su agresor llevaba cinco meses, de los cuales el último mes fue de convivencia. Su hermana Luján explicó que durante ese lapso Nadia fue aislada por González, quien le sacó un celular (también devolvió uno que le regalaron las hermanas) y le manejaba la clave de las redes sociales. El agresor de la joven fue detenido 48 horas después de que la abandonó en la Guardia del hospital.
