El hallazgo se produjo en la tarde del domingo, en proximidades del puesto Llantén, a unos 10 km de puesto Pardo, donde encontraron los cuerpos de Eduardo y Darío Aranguez.
Según se pudo saber, un puestero se encontraba haciendo algunos trabajos de arreo en el campo y detectó el cuerpo cerca de la orilla.
Los tres pescadores, que vivían en la localidad rionegrina de Catriel, habían desaparecido cuando concurrieron al lago a pescar, hace poco más de un mes.
Se presume que se ahogaron el lunes 30 de septiembre, aun en circunstancias no aclaradas. Un día después, la familia hizo la denuncia, cuando no regresaron a Catriel.