El presidente de la Nación, Alberto Fernández, aterrizó este martes cerca de las 6.15 hora argentina en Madrid para reunirse con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez. También será recibido por el Rey Felipe VI.
El objetivo es el mismo que ya lo llevó a Italia y Alemania: seguir sumando apoyos en la negociación de la deuda ante el Fondo Monetario Internacional (FMI) y disipar dudas sobre la inserción en el mundo del Gobierno. “Hasta ahora la gira es un 10, por no decir un 11”, graficaron cerca del Presidente tras la reunión con Merkel.
Fernández voló con su comitiva en un vuelo de Iberia Express. El encuentro con el Rey será en el Palacio de la Zarzuela a las 16.30 de España (mediodía argentino), según consta en la agenda de la Casa del Rey. Previamente tiene previsto un almuerzo con Sánchez. Alberto Fernández es el primer jefe de Estado o Gobierno que viaja a España tras la toma de posesión del nuevo Ejecutivo de Pedro Sánchez; ahora en coalición con Unidas Podemos.
Además de la deuda argentina en el FMI, uno de los temas que estará sobre la mesa casi con seguridad será Venezuela. España, que había reconocido a Juan Guaidó, ahora es el impulsor del “grupo de contacto”, que apunta a una salida institucional y con elecciones.
El mandatario argentino ya había visitado en Sánchez, tras las PASO y antes de las generales. En la comitiva oficial, confiaban en el apoyo del líder del PSOE.
El Presidente había acordado el encuentro con el rey, cuando ambos coincidieron en Jerusalén, en las conmemoraciones por el Día Mundial del Holocausto
Como en Roma, donde se hospedó en la residencia del embajador ante la Santa Sede, el Presidente usará finalmente la sede diplomática argentina en Madrid como base de operaciones, una idea que al principio había quedado descartada por la falta de agua caliente.
En la delegación contaron que la gira también sirvió para disipar dudas sobre la política exterior de la Casa Rosada y sobre el presunto aislamiento que propiciaría el Frente de Todos y que -recuerdan- instaló Mauricio Macri en la campaña.
Con ese fin, Fernández mantuvo reuniones con representantes de empresas alemanas en Berlín y con firmas italianas, en Roma. En España había planeado una reunión con Ana Botín del Grupo Santander, a quien ya había visitado tras las primarias de agosto. Sin embargo, el nuevo encuentro no está confirmado. Lo mismo ocurrió con Josep Borrell, jefe diplomático de la Unión Europea.
El equipo que acompaña al Presidente sufrió algunos cambios. El ministro de Economía, Martín Guzmán, que se había sumado el lunes a la delegación en Berlín para participar de la reunión con Merkel, partió a Roma donde este miércoles asistirá a un foro de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales, del Vaticano, junto a la titular del FMI, Kristalina Georgieva. El secretario de Asuntos Estratégicos Gustavo Béliz también será de la partida. En tanto, el diputado Eduardo Valdés, que ya había participado del viaje a Israel y suena para ocupar la presidencia de la comisión de relaciones exteriores de la Cámara baja, se sumó para lo que resta de la gira.
Fernández tiene que designar pronto a un embajador, tras la partida de Ramón Puerta. En el oficialismo tentaron al dirigente Ricardo Alfonsín, pero el hijo del ex presidente y patriarca radical por ahora rechaza la oferta.
En tanto, el diputado Eduardo Valdés, que ya había participado del viaje a Israel y suena para ocupar la presidencia de la comisión de relaciones exteriores de la Cámara baja, se sumó para lo que resta de la gira.
Esta misma noche, el Presidente y su delegación partirán a París, donde se reunirán con Emmanuel Macron.