Tras la renuncia de Evo Morales, el gobierno del presidente Mauricio Macri hizo hoy un llamado a “preservar la paz social y el diálogo” en Bolivia, pero evitó hablar de “golpe de estado”, tal como hizo el mandatario electo Alberto Fernández.
“Ante renuncia a su cargo como Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, anunciada hoy en la tarde, por Evo Morales Ayma, el Gobierno argentino hace un llamado a todos los actores políticos y sociales bolivianos para preservar la paz social y el diálogo, enfatizando importancia de encaminar este período de transición que se ha abierto por las vías institucionales que establece la Constitución de ese país”, expresó la Cancillería.
Según consideró el gobierno nacional, “resulta imprescindible que todas las fuerzas y dirigentes políticos bolivianos actúen en este delicado momento con responsabilidad y moderación”.
“El anunciado llamado a un nuevo proceso electoral, con la anticipada renovación del Tribunal Electoral, respetando lo dispuesto por la Constitución Política del Estado Plurinacional Boliviano junto con el acompañamiento de países de la región así como de organismos internacionales y observadores imparciales es el mejor camino para superar, con total transparencia y espíritu democrático, la presente crisis que afecta al hermano pueblo boliviano”, consideró Cancillería en un comunicado.
Este domingo, tras la renuncia de Morales, el presidente electo se comunicó con Macri para hablar sobre Bolivia.
Luego de esa comunicación, el Ministerio de Relaciones Exteriores difundió la declaración, en la que no habló de “golpe de estado”, tal como hizo Fernández.
El mandatario electo consideró “lamentable” lo ocurrido y pidió pidió que Bolivia “vuelva cuanto antes al sendero de la democracia” a través de “elecciones libres” y le sugirió al Gobierno de Mauricio Macri que colabore “preservando la integridad física de quienes puedan resultar perseguidos por el golpismo.
“El compromiso de la Argentina con la institucionalidad y contra cualquier forma de golpe de Estado en el continente debe ser total”, remarcó Fernández.
Y agregó que tiene expectativas en que “las actuales autoridades actúen bajo ese mismo principio preservando la integridad física de quienes puedan resultar perseguidos por el golpismo y colaboren hasta el 10 de diciembre con la recuperación de la democracia en Bolivia”.
El pedido al Gobierno de Mauricio Macri tiene que ver, entre otras razones, con la versión de que Evo Morales e integrantes de su Gobierno podrían pedir asilo político en el país.
A su vez, también se relaciona a la preocupación de Fernández para que en Bolivia se desarrollen prontamente “elecciones libres” y “sin proscripciones” que restauren el orden democrático en la nación sudamericana.
“El quiebre institucional en Bolivia es inaceptable. El pueblo boliviano debe escoger cuanto antes, en elecciones libres e informadas, a su próximo gobierno”, enfatizó.
Al respecto, agregó: “Defenderemos firmemente la democracia en toda América Latina. Después de este quiebre institucional, Bolivia debe volver cuanto antes al sendero de la democracia a través del voto popular y sin proscripciones”.